sábado, 5 de mayo de 2012

Adolescencia.

Hasta hace poco no odiaba esa palabra, la verdad es que hace unos dos o tres años quería ser una adolescente, me parecía lo más guay del mundo, no tenía ni idea... Ser adolescente es una mierda, te enfadas sin motivo, contestas mal, sientes que nadie te entiende, quieres a tus padres pero a veces piensas que los odias porque no te entienden, las únicas personas que te entienden son tus amigos y te acercas mucho más a ellos que a la familia. Y ya, lo mejor viene cuando te sueltan el típico "Yo también fui adolescente, aunque no lo creas". Ahora tampoco es que la odie, pero hace poco leí un libro que me hizo reflexionar y comprender que era más mierda de lo que creía que lo era.
También dicen que esta es la mejor y peor etapa de nuestra vida, la peor por todos los cambios, la mejor porque es cuando mejor se vive, cuando se hacen amigos para toda la vida, cuando eliges tus propias decisiones, cuando te caes y te vuelves a levantar, cuando te das cuenta de lo que de verdad te gusta, cuando te empiezas a hacer independiente, cuando vas a tu primer concierto, cuando das tu primer beso, cuando tienes tu primer amor, en mi caso cuando haces tu primera excursión al extranjero, cuando te vuelves loca por un grupo de música, por los personajes de los libros y un millón más de experiencias.
Que quede claro que para mi la adolescencia no es la etapa en la que te mentes de todo en el cuerpo, empiezas a fumar, a drogarte, a beber hasta no recordar tu nombre y a liarte con tres tíos en una noche.
Adoro la juventud, me gusta ser joven, pero sé que algún día eso cambiará, que luego veré las cosa desde otro punto de vista y pensarlo a veces me aterra porque veo a mis padres estresados por si llegamos a fin de mes, por si hay trabajo o no y no me gusta eso, ¿qué pasa si no puedo ir a la universidad? ¿qué pasa si voy y luego no encuentro trabajo? son preguntas que aún no quiero hacerme. Pero luego veo a mis padres que a pesar su estrés, de los problemas y de todo, se siguen queriendo, que todo lo superan juntos y se me quita un poco ese miedo. En realidad aunque el noventa por ciento de las veces de esta etapa de mi vida me pongan de los nervios pienso que son unos verdaderos superhéroes, la verdad es que a veces no sé ni como me aguantan, yo desde luego no lo haría. Y aunque no siempre lo diga se lo agradezco mucho.
La verdad ser adolescente es una mierda y una pasada a la vez, pero nada ni nadie es perfecto, la adolescencia no iba a ser la excepción. Aunque pienso que cuando sea viejecita y me acuerde de estos años, los recordaré como los mejores de mi vida, porque solo recordaré las cosas bonitas, las experiencias, se me olvidarán las peleas, los enfados, las mentiras...
Pero un consejo a mí y a todos vosotros vivid la vida segundo a segundo, como si todos fueran el último.